Melanoma es el nombre genérico de los tumores melánicos o pigmentados o una grave variedad de cáncer de piel, causante de la mayoría de las muertes relacionadas con el cáncer de piel. Se trata de un tumor generalmente cutáneo, pero también del intestino y el ojo (melanoma uveal) y altamente invasivo por su capacidad de generar metástasis. A pesar de varios años de investigaciones extensivas, el único tratamiento efectivo es la resección quirúrgica del tumor primario antes de que logre un grosor mayor de 1 mm.
Los consejos para un bronceado con total seguridad son los
siguientes según los dermatólogos del Hospital Nisa 9 de Octubre Dres.
Vicent Alonso y Manuel Grau:
1. Se debe aplicar el protector solar antes de la exposición al sol
y renovar frecuentemente su aplicación, sobretodo después de cada baño.
2. Debe exponerse progresivamente al sol y evitar la exposición solar entre las 12h y las 16h.
3. Evite las sesiones bronceadoras con lámparas de rayos UVA ya que
contribuyen a la aparición de cánceres cutáneos y aceleran el
envejecimiento cutáneo.
4. No exponga a insolación directa a los niños menores de tres años
y en las horas de débil insolación protéjales con un fotoprotector de
alta protección a fin de preservar el mayor tiempo posible su capital
solar. Hay que tener en cuenta que la piel conserva la memoria de todas
las radiaciones recibidas durante la infancia. Cuanto más importante ha
sido la dosis de radiación, mayor es el riesgo de aparición de cánceres
en la edad adulta.
5. No olvide que también puede quemarse haciendo actividades al
aire libre: montando en bicicleta, paseando, realizando deporte, en el
jardín… En todas estas ocasiones aplíquese un fotoprotector.
6. No se fíe de las circunstancias que comportan un riesgo
suplementario o una falsa seguridad: altitud, nubosidad, superficies
reflectoras (nieve, arena, hierba, agua), viento fresco…
7. Protéjase con gorra y gafas de sol con cristales homologados
capaces de filtrar los rayos UVA y UVB. A los niños, además, protéjalos
con una camiseta seca y opaca: una camiseta mojada deja pasar los rayos
UV.
8. Séquese bien después de cada baño. El efecto lupa de las gotas
de agua favorece las quemaduras solares y disminuye la eficacia de los
protectores solares aunque estos sean resistentes al agua.
9. Beba agua en abundancia y frecuentemente. El sol deshidrata
nuestro organismo. Vigile sobretodo a las personas mayores, cuya
sensación de sed está atenuada y a los niños, cuya necesidad de agua es
importante y sus centros de termorregulación todavía inmaduros.
10. Si advierte que una peca o lunar cambia de forma, tamaño o color consulte a su dermatólogo.
Bueno, después de esto hay poco que decir. Tened mucho cuidado con el sol este verano, que lo que parece un simple día de playa, se puede convertir en un infierno por las quemaduras si no tomas la precaución adecuada.
este veranito sombrerito y mucha protección ok!!!
ResponderEliminarVamos a la playa oh oh oh oh .jajaja